Una sesión de mandalas es un encuentro con nuestra propia esencia. Es un camino que se recorre de forma pacífica y con perseverancia, a través de la propia intuición para conectar con el origen de cuales positivas que yacen al interior del ser.

A través iluminar y/o crear mandalas nos enfocamos, liberando a la mente y generando un espacio para la meditación. Al estar meditando permitimos que el flujo de energía creativa se exprese de forma libre y espontánea, revelando nuestros más íntimos sentimientos y sensaciones.

Será entonces primordial hacer caso a la intuición y dejarle expresarse libremente a través de la elaboración de trazos, formas, patrones y de la elección de colores, lo que simplemente proyectara de forma genuina nuestro estado presente y un mapa que nos guía hacia el descubrimiento del más grande tesoro, conocernos a nosotros mismos.

Nada es casualidad, la vida es una causalidad de nuestras acciones y emociones. Somos una proyección de nuestro propio estado, a través del cual nos comunicamos y establecemos contacto con el ambiente que nos rodea. Los mandalas entonces son una poderosa herramienta creativa y artística, para el autoconocimiento, la expresión y la comunicación.

Para una sesión de mandalas simplemente encuentra un lugar tranquilo, donde puedas enfocarte en esta actividad. Rodéate de cosas que apoyen este estado de concentración, quizá algo de música, o un espacio de silencio, al aire libre o tu espacio favorito en casa. Reúne los elementos necesarios: desde un lápiz y una hoja de papel, y hasta todo un pliego de cartulina, estuche de geometría, tu set de colores y plumones favoritos. En el papel que uses traza un círculo o los que consideres necesarios, cierra por un momento tus ojos y realiza un par de respiraciones profundas, al abrir tus ojos sabrás como iniciar tu camino.

Pintar mandalas es una actividad que no requiere mucho esfuerzo ni conocimientos especiales, de la que se pueden obtener grandes resultados, por esto es ideal para cualquier tipo de persona.

Los mandalas nos ayudan para:

– Meditar de forma activa.

– Como método de relajación, armonía y tranquilidad.

– Desarrollo de la paciencia.

– Despertar los sentidos y la intuición.

– Apoyar la coordinación, expresión y el desarrollo mental.

– Incrementan el autocontrol.

– Conectar con la creatividad.

– Mantener la concentración.

Autor: Flavio López 

Ingeniero en electrónica y con más de 20 años de experiencia en el área de las telecomunicaciones, siempre con una tendencia clara hacia las artes plásticas y pasando por experiencias básicas en el área de la pintura, dibujo y escultura, Flavio encuentra en la fotografía una fuerte pasión y atracción.
Interesado en el desarrollo personal y de las cualidades humanas, desde el año 2010 se integró a la práctica del Bön Budismo en donde tiene su primer contacto con los #Mandalas (budistas) y en febrero del 2015 realizó un curso orientado a la creación de Mandalas, “Dentro del círculo, al mandala y al laberinto”. A partir de ese momento surgió en él la pasión por la creación de estas imágenes de perfecta sincronía y significado.

 

mandala-2

Anuncio publicitario