Caroline Ribero. Titulada en fisioterapia y miembro del grupo de estudios “dialogando con las emociones”, colaboradora del curso Mandala de las Emociones, UNICAMP 2016.
Como sabemos, la epilepsia es una enfermedad neurológica que afecta cerca del 2% de la población mundial. Además de imponer un gran peso en la vida social, económica, escolar y familiar, la enfermedad refleja una carga enorme en las cuestiones psicológicas del paciente.
Se encuentran con gran frecuencia pacientes con reportes de enfrentamiento personal, vergüenza, miedo y dificultades para socializar.
Como una propuesta para exponer, soltar e incluso permitir que el paciente reencuentre sus sentimientos y emociones, utilizamos el método de Mandalas de las Emociones en algunos grupos de pacientes en el ambulatorio de neurología de la Universidad de Campinas, UNICAMP.
Realizar la propuesta de proporcionar una nueva experiencia al paciente (con el uso de las mandalas) resultaba en algo de duda, curiosidad y también un poco de miedo, pues sería algo nuevo y desconocido. Invitamos a los pacientes y sus familiares para que participaran de una sesión, en la cual pondríamos piedras alrededor de sus cuerpos, ombligo, cabeza y pies.
Algunos, en su búsqueda casi voraz por descubrimientos y novedades lo aceptaban inmediatamente. Otros eran más cerrados y lo aceptaban con algo de miedo. Después de aceptado, el paciente contestaba un cuestionario que nos indicaría a los miembros del equipo la forma de atención.
Luego, llegaba el momento de la aplicación, cuando el paciente podía acostarse en una camita por un rato, relajarse y solamente permitir que sus pensamientos le dijeran algo adentro de aquella sala silenciosa. Ahí, nosotros posicionábamos las piedras de acuerdo a la emoción y perfil emocional elegidos por el paciente en su cuestionario inicial. La recomendación al paciente siempre era: relájate, deja tus pensamientos libres.
Es importante aclarar que los pacientes llegaban siempre en estados muy parecidos. Puedo decir que teníamos dos grupos distintos: los pacientes abiertos y dispuestos a conocer algo nuevo y los pacientes que no creían en nada y entraban preocupados e incluso amargados. Después de 15 minutos, el equipo regresaba a la sala y el paciente tenía la oportunidad de contarnos sus emociones y sentimientos.
Consideramos muy perceptible el cambio emocional en cada uno de los pacientes. Algunos demostraban total relajación, y puedo decir que hasta llegaban a un estado letárgico, un sueño profundo, donde tenían dificultades de reportar sus emociones. Otros decían claramente haberse relajado y haberse olvidado sus problemas, haber pensado en soluciones y haber encontrado razones para alegrarse y agradecer.
Era realmente increíble. Lo chistoso es que incluso los pacientes que habían ingresado en la sesión cerrados, nos reportaban mucho sueño, relajación y que habían tenido muchos pensamientos: lograron acordarse de cosas buenas y despertaron pensamientos que habían sido olvidados o ignorados.
Nos dimos cuenta que aquellas pequeñas piedras realmente tocaban y cambiaban el estado emocional de las personas, y nos enseñaban que deberíamos tener esperanza. Fue muy gratificante el hecho de que alguien que tiene mucha dificultad para interactuar con la sociedad y expresar sus emociones, había logrado decir y reportar cambios en su estado de ánimo desde su llegada hasta el cierre de la sesión.
Me acuerdo muy bien de una paciente que demostraba resistencia para aceptar su participación en nuestra investigación. Una persona encargada de las invitaciones y llenado del cuestionario nos dijo que ella no aceptaría, por distintas razones, pero la principal era que ella no quería perder el horario de su cita médica. En cuanto entendió que su cita no sería afectada, aceptó participar en la entrevista inicial. La Dra Hui Ling y yo le explicamos detalladamente lo que pasaría adentro de la sala y les dimos la orientación a los participantes. Toda la sesión sucedió de una manera tranquila. Al momento de nuestro regreso a la sala ella no se limitó a agradecernos. Nos dijo que había estado en un mal día, con muchos problemas, pero que los minutos que había pasado dentro de la sala habían sido un viaje hacia un estado de relajación como nunca lo había tenido antes. En ese momento tuve la certeza que íbamos por un buen camino, pues el momento en el que se logra cambiar la percepción acerca del estado emocional de una persona, nos hace sentir que valió mucho la pena.
Muchos casos nos marcaron. Ente ellos me gusta acordarme de un paciente que llegó a mi consultorio diciéndome que nadie tenía paciencia para escucharla y ella tampoco tenía el valor de hablar acerca de sus sentimientos. Le pedimos que nos esperara solamente un determinado tiempo y que dejara que sus pensamientos sonaran alto adentro de ella misma durante los minutos que pasaría dentro de la sala. Cuando regresamos, nos dijo que había pensado mucho lo que le gustaría decir a su mamá y que había tomado una decisión: “enfrentaría” su deseo de relacionarse con un chico que le gustaba e intentaría convencer a su mamá de que ella podría hacerlo y que eso le dejaría feliz. Me emocioné mucho con este caso, pues tal vez las personas no le daban la oportunidad de decir las cosas porque no ella tenía el valor de pedir la atención necesaria para sí misma. Tal vez no creía que su sueño era posible.
Estoy segura de que los Mandalas de las Emociones no traen beneficios sólo para los pacientes con epilepsia, sino que benefician a todas las personas que quieran encontrar respuestas y maneras de despertar sus emociones.
Con este sentimiento de mucha gratitud, cierro mis comentarios sobre esta increíble experiencia.
Copyright © 2016, Li Hui Ling , Li Li Min, Sueli Adestro, Carolina Toneloto.
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Editoras Responsáveis
Sueli Adestro Carolina Toneloto
Diagramação e Arte
Alline Camargo
Revisão
Carolina Toneloto Sueli Adestro
Ficha Catalográ ca (Câmara Brasileira do Livro, SP, Brasil)
Olhares sobre a Epilepsia: Dialogando com as Emoções – Mandalas das Emoções. Organizadores: Li Hui Ling, Li Li Min, Sueli Adestro, Carolina Toneloto. Campinas: ADCiência Divulgação Cientí ca, 2016.
48 p.
ISBN: 978-85-69736-05-9
- Epilepsia. 2. Mandalas das Emoções. I. Li Hui Ling Li. II. Li, Li Min. III. Sueli Adestro. IV.Carolina Toneloto.
CDD: 616.853
Traducción: Bruno Machado Teixeira
Edición: Zoar Martínez Ramírez
Mandala: Flavio López Martínez